No hay placer más exquisito ni gusto que pasar, que sentarse en el retrete cuando hay ganas de cagar… (¿estreñida?)
Nuria Barrios | LTO'N
📆 Actualizado: 2025
A ver,
lo normal es estreñirse cuando las cosas no se hacen bien:
mala dieta, sedentarismo, estrés…
PERO,
también cuando llevas mucho haciendo las cosas mal y empiezas a hacerlas bien.
Esos cambios pueden producir desequilibrios en las digestiones y en la flora intestinal, y pueden hacer que te estriñas.
Ahora te voy a dar varios consejos para combatir ese estreñimiento.
Aunque algunos ya los hacemos dentro de esta dieta,
quiero que veas que vas por el buen camino y que los ajustes que debes hacer son mínimos y alineados con la filosofía de la Leona Moderna.
-> Aumenta la ingesta de grasas saludables (ya lo hemos hecho :D)
Las grasas saludables lubrican las mucosas intestinales,
facilitando el movimiento de las heces.
Como el lubricante en el sexo (;
Es decir,
las grasas no sólo son esenciales para la energía y el equilibrio hormonal,
también para el bienestar digestivo.
Incorpora alimentos como aguacate, aceite de oliva virgen extra, mantequilla ghee, aceite de coco o frutos secos (como ya hacemos aquí).
Y toma el AK-Kfé,
que no solo te aporta grasas saludables,
también estimula tu metabolismo y el peristaltismo intestinal*.
Recuerda que nuestros antepasados consumían grasas animales y vegetales de fuentes naturales (como sebo o tuétano),
que apoyaban la salud intestinal sin depender de carbohidratos refinados.
-> Incorpora alimentos ricos en fibra viscosa
La fibra viscosa (como la de las semillas de chía, aloe vera o agar-agar) aumenta el volumen de las heces y actúa como un lubricante natural,
facilitando su paso por el intestino.
En La Dieta de La Leona Moderna, estas fuentes de fibra son ideales porque no aportan carbohidratos netos significativos.
Para ello,
remoja semillas de chía en agua o caldo de hueso durante 10-15 minutos y consúmelas como pudding o añádelas a caldos.
El aloe vera fresco o el agar-agar también son excelentes en batidos.
También puedes preparar un gel de semillas de lino (remojadas en agua) para añadir a tus comidas.
Es otra fuente de fibra viscosa que se alinea con La Dieta de La Leona Moderna y es fácil de incorporar en sopas o caldos.
Los pueblos antiguos usaban plantas ricas en mucílagos (como el lino o el aloe) para mejorar la digestión,
aprovechando sus propiedades naturales sin procesar.
-> Aumenta las sales minerales en tu dieta (ya lo hacemos)
La deficiencia de minerales como magnesio y sodio puede ralentizar el peristaltismo intestinal.
En dietas salvajes (como LDLM), la pérdida inicial de electrolitos es común y reponerlos es crucial.
Bebe 50-100 ml de agua de mar filtrada diluida en un vaso de agua en ayunas,
o usa sal marina de calidad en el agua y/o tus comidas para aportar sodio y otros oligoelementos.
Incorpora caldos de hueso caseros,
ricos en minerales y colágeno,
que no solo reponen electrolitos,
sino que también nutren la mucosa intestinal mejorando la salud digestiva.
(Es algo que ya deberías estar haciendo.)
Nuestras “antiguas madres” (ancestras) obtenían minerales de fuentes naturales como el agua de manantiales o alimentos ricos en electrolitos,
como hacen la leonas,
sin depender de suplementos de laboratorio.
-> Magnesio en forma de citrato
Aunque no promuevo los suplementos como base,
en ciertos momentos pueden ser una gran complemento estratégico.
Como en este caso el citrato de magnesio,
que tiene un efecto osmótico, atrayendo agua al intestino para ablandar las heces y facilitar la evacuación,
siendo especialmente útil en dietas bajas en carbohidratos (como esta) donde el equilibrio de electrolitos es clave.
Toma una dosis de citrato de magnesio (200-400 mg) en ayunas con agua,
ajustándola según tolerancia para evitar efectos laxantes excesivos.
Complementa con alimentos ricos en magnesio, como espinacas, col rizada o semillas de calabaza (ya sabes, de calidad),
para mantener niveles óptimos de este mineral sin depender únicamente de suplementos.
En la vida salvaje se obtenía (y obtiene) magnesio de vegetales silvestres y agua de fuentes naturales,
apoyando la función intestinal sin productos procesados.
-> Haz caca como el unicornio
Antes de nada te dejo este vídeo random:
La postura de cuclillas (la que ves hacer al unicornio en el vídeo) alinea el colon y relaja el músculo puborrectal,
facilitando una evacuación más completa y natural,
que es para lo que estamos hechas.
Usa un taburete bajo (como el del vídeo – “squatty potty” – que es el mismo que yo uso jeje) para simular la posición de cuclillas,
o practica esta postura en un baño adaptado.
Realiza ejercicios como sentadillas profundas para fortalecer la musculatura pélvica y mejorar la mecánica de evacuación a largo plazo.
(Y para estar mamadísima.)
La mayor parte de nuestra existencia hemos hecho popó de cuclillas al aire libre,
lo que optimizaba la anatomía natural del cuerpo para la expulsión de las heces.
En muchos lugares del mundo, como en Asia, se sigue haciendo.
-> Prueba el ayuno intermitente (que ya debes haberlo hecho a estas alturas)
El ayuno intermitente activa el «complejo migratorio motor» o como yo lo llamo “los barrenderos”,
el mecanismo que limpia el intestino de restos de comida, reduciendo la inflamación y el estreñimiento.
Y que causa ese ruido que confundimos con hambre y que no es hambre,
es limpieza.
Cuando comes para acallarlo, lo cortas e impides que se produzca.
Recuerda que el ayuno es una práctica alineada con los ciclos naturales de una alimentación salvaje.
Implementa ayunos de 16:8 (16 horas sin comer, 8 horas para alimentarte) o ayunos de 24 horas al menos una vez por semana,
asegurándote de mantener la hidratación y los electrolitos.
(Como hacemos en LDLM.)
Durante los momentos para comer,
prioriza comidas salvajes ricas en nutrientes (como hígado, yemas de huevo o vegetales bajos en carbohidratos) para maximizar la salud intestinal sin sobrecargar el sistema digestivo.
Los cazadores-recolectores (nuestros ancestros) ayunaban de forma natural durante períodos sin acceso a alimentos,
lo que activaba procesos de limpieza intestinal y regeneración.
-> Mantén una hidratación adecuada con electrolitos
La deshidratación es una causa común de estreñimiento,
especialmente en dietas salvajes,
donde la pérdida de agua es mayor debido a la reducción de glucógeno.
Una hidratación adecuada, combinada con electrolitos,
ablanda las heces y apoya el peristaltismo.
Bebe suficiente agua añadiendo una pizca de sal marina o electrolitos (sodio, potasio, magnesio) para mantener el equilibrio.
Infusiona tu agua con hierbas como menta o jengibre,
que no solo mejoran el sabor, sino que también tienen propiedades digestivas que estimulan el movimiento intestinal.
Nuestros antepasados salvajes bebían agua de fuentes naturales ricas en minerales y consumían plantas con propiedades digestivas,
manteniendo una hidratación funcional para la salud intestinal.
Algo que hoy en día es casi imposible entre sistemas de tuberías llenas de mierda, aguas desmineralizada (como si eso fuese bueno) y botellas de plástico,
*Peristaltismo intestinal.
Es el conjunto de movimientos musculares involuntarios y coordinados que ocurren en las paredes del intestino para desplazar los alimentos,
desechos y heces a lo largo del tracto digestivo.
Estos movimientos son contracciones rítmicas que empujan el contenido intestinal desde el estómago hacia el colon,
facilitando la digestión, absorción de nutrientes y la eliminación de residuos.
Características clave:
- Mecanismo: las capas musculares del intestino (longitudinales y circulares) se contraen y relajan alternamente, creando ondas que mueven el contenido como si fuera un tubo exprimido.
- Función: ayuda a mezclar los alimentos con enzimas digestivas, avanzar el bolo alimenticio y, finalmente, expulsar las heces durante la defecación.
- Regulación: es controlado por el sistema nervioso entérico (el «segundo cerebro» del intestino), influenciado por el sistema nervioso autónomo y factores como la dieta, hidratación y electrolitos.
*Esto es bastante técnico, pero no está de más comprenderlo.
Relación con el estreñimiento:
Un peristaltismo lento o ineficiente,
causado por factores como deshidratación, falta de fibra, desequilibrio de electrolitos (como magnesio o sodio) o sedentarismo,
puede provocar estreñimiento.
Por eso,
prácticas como las que te he dado antes (fibra viscosa, magnesio, hidratación, etc.),
estimulan el peristaltismo para mejorar el tránsito intestinal.
Bien.
Debes saber que, cuando haces esta dieta,
normalmente el estreñimiento es pasajero y acaba desapareciendo.
A veces no hay que hacer nada más que continuar con la dieta y dejar que haga efecto.
Por otro lado,
si venías de ir al baño varias veces (y manchando demasiado con diarreas o heces blandas) y ahora vas 1 al día, o día sí y día no,
no debes alarmarte porque entra dentro de la normalidad salvaje.
Ir al baño 1 vez al día y hacer un “perfect” (no manchar) es lo que debería ser la norma,
es lo saludable y lo adecuado.
Así que es motivo de celebración,
no de preocupación.
Igualmente, háblalo con tu médico de cabecera,
y si te queda alguna duda o quieres ayuda con algo,
escríbeme en el soporte.
(:
PD: como dice la canción,
“No hay placer más exquisito ni gusto que pasar, que sentarse en el retrete cuando hay ganas de cagar”
Continuar con: